– ¡Pobre Juárez, tan lejos del centro!
– Javier el necio
– Javier, ¿el incumplido?
– Cruz se deja querer por los líderes de la IP
– No les importó lo “charro” del lienzo
– Gracias a la T-bone steak
– Los buenos tiempos del PRI
Durante la mañanera del miércoles el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, acusó de politiqueros a aquellos juarenses que se atrevieron a expresar públicamente que el gobierno federal olvidó a Ciudad Juárez en la vacunación antiCovid.
A mediados de junio el presidente, junto a su flamante subsecretario Hugo López Gatell, anunciaba que había aterrizado en México un cargamento de más de 1.3 millones de dosis de Janssen, un fármaco de Johnson & Johnson que había donado Estados Unidos para vacunar exclusivamente a residentes de localidades fronterizas del norte de México. La medida tenía un objetivo muy claro: la reapertura de la frontera común, cerrada desde la llegada del coronavirus.
El mismo López Gatell informó que las vacunas se aplicarían en 39 municipios de los seis estados fronterizos, situación que no ocurrió, porque desde el centro de país se decidió modificar la estrategia. El 18 de junio AMLO dijo ante la prensa que Baja California sería el primer estado en lograr la vacunación universal, lo que no dijo fue que en esa entidad se agotó el lote donado por EU.
Luego de que transcendiera que las vacunas de los municipios fronterizos se agotaron en Baja California Norte, líderes empresariales y sociales de la localidad lanzaron un reclamo, ante lo que ellos consideraron un acto discriminatorio. Después vinieron otros más que incomodaron al presidente.
Fiel a su estilo, AMLO no dudó en llamarlos “politiqueros” y acusarlos de actuar “de mala fe” al sembrar la equívoca idea de que a Ciudad Juárez se le está dejando sin vacunas.
Tuvieron que pasar 19 días para que el presidente de la República, desde el centro del país, informara que la vacunación tardará en llegar a la ciudad, porque ahora resulta que en la frontera con Estados Unidos no se puede aplicar cualquier vacuna, solo la Pfizer y la Johnson & Johnson. De no inmunizar a su ciudadanos con esas marcas, el vecino país no abrirá la frontera con México. No obstante, las razones del mandatario vuelven a quedarse cortas.
La condicionante de las dos vacunas, impuesta por EU, afectará a miles de personas, entre ellas maestros y personal médico que ya fueron vacunados con otro tipo de vacunas, como la Cansino, y que probablemente no podrán cruzar al vecino país a menos que demuestren que los inocularon con las marcas de las farmacéuticas mencionadas.
Este Mirone, desde este recóndito lugar –para los del centro– en donde inicia la Patria, le pregunta al Señor Presidente: ¿Qué pasará con los miles de maestros y médicos que fueron vacunados en la frontera? ¿Acaso los volverá usted a vacunar?
Que le quede bien claro que esto no es politiquería, pero sí es un sentido reclamo al agobiante centralismo que en pleno siglo XXI sigue asfixiando a los estados, a regiones que por mucho tiempo han sido minimizadas y tratados como menores de edad, decidiendo por ellas a miles de kilómetros de distancia, desde escritorios en los que no se tiene ni la más remota idea de la realidad de la frontera y sus dinámicas con Estados Unidos.
¿Cómo es posible que se tomen ese tipo de decisiones y que nadie piense en este tipo de consecuencias? Este no es un problema menor, estamos hablando de la frontera más grande del mundo, una enorme región de millones de habitantes que cohabitan de uno y del otro lado de la línea fronteriza.
Y el tema que sigue dando de qué hablar es la transición del gobierno estatal. Ayer miércoles, la gobernadora Maru Campos exhibió a Javier Corral a nivel nacional en entrevista con Ciro Gómez Leyva para Radio Fórmula, como un necio que se resiste a entregar la información al equipo que conformará la siguiente administración.
“De verdad que no quiere, no quiere, no quiere trabajar conmigo… pero, aunque no quiera estamos tratando de trabajar con sus funcionarios, pero es una obligación constitucional”, dijo Campos al periodista.
Luego del reclamo de la gobernadora electa, Javier Corral salió a decir que es falso que el estado obstaculice el proceso de transición, como lo han señalado Maru Campos y su equipo.
Corral insistió en que “se trata de una descalificación anticipada de la gobernadora electa para tratar de trabar un proceso –que venía ocurriendo con buen ánimo y absoluta disposición–, para luego volver a victimizarse, lo que le dio excelentes resultados en la campaña electoral, pero esa etapa ya culminó”.
En este ir y venir de confrontaciones por parte de los dos equipos, los chihuahuenses ya no saben a quién creerle. Por lo pronto, la tarde de ayer, el secretario de Finanzas Arturo Fuentes Vélez, dejó plantado al equipo de transición del gobierno entrante, lo que dejó claro el rompimiento.
Se le olvida al gobernador que no entregará la administración estatal de Javier Corral, sino la administración de los chihuahuenses. Le aplica al equipo entrante la política del avestruz y viene y esconde la cabeza y el cuerpo entero en Juárez. Además, no se ve voluntad de su parte para entregar la administración. Hasta ahora, según la propia Maru, el góber no se ha comunicado con ella para iniciar el proceso de entrega-recepción. No quiere.
El proceso de transición seguirá su tortuoso paso, pero finalmente no hay fecha que no se llegue, ni plazo que no se cumpla. Tendrá que llegar el día en que finalice la administración de Corral y, en la medida de su oposición, le vendrán días aciagos y nublados después de entregar el poder.
En los próximos días, entre más se oponga Corral a soltar la información, más fuerte vendrán los revires. No le vaya a pasar lo del famoso dicho: “el que a hierro mata, a hierro muere”, tal como le pasó a César Duarte. Corral debería estar concentrado al 100 por ciento en la entrega, pero tal parece no lo está.
En realidad debería andar preocupado por los focos rojos y frentes abiertos de su administración. Por ejemplo: los 8 mil millones de pesos que tiene señalados por la Auditoría Superior del Estado de supuestas irregularidades, el paro de labores en el subsistema de Educación Media Superior del Estado de Chihuahua CECyTECH, los problemas administrativos, financieros y recursos humanos en el Cobach; la problemática de Pensiones, los servicios médicos, falta de pago a proveedores,; los frentes de obra atrasadas y un largo etcétera.
A propósito de focos rojos y hogueras, la fogata que amenaza con crecer las llamas y quedar fuera del alcance de los apagafuegos, es la provocada por el plantón de docentes y personal administrativo del subsistema de Educación Media Superior del Estado de Chihuahua CECyTECH, que reclaman una serie de prestaciones incumplidas por parte del gobierno de Corral.
El pasado miércoles, los maestros y trabajadores de los colegios de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado de Chihuahua, pertenecientes al CECyTECH, iniciaron un plantón en el exterior de las oficinas generales, allá en la capital, para manifestar su inconformidad y exigir el cumplimiento de sus prestaciones laborales.
La directora general del CECyTECH, Ana Belinda Ames Russek, literalmente obligó al personal administrativo a acudir a las oficinas durante todo el tiempo que lleva la pandemia, a diferencia de otras instituciones como Bachilleres o Cbtis, cuyos directivos fueron más benevolentes.
Los trabajadores de la educación reclaman el bono de antigüedad, el bono especial de seguridad social, que destraben el escalafón vertical, entre otras prestaciones que les han sido retiradas sin justificación alguna. El temor de los trabajadores de este subsistema es que la actual administración estatal ya se va y los dejarían colgados de la brocha con esas prestaciones pendientes, las que el estado tiene la obligación de cumplirles.
Los representantes sindicales no solo participan en el plantón, sino que han parado labores. Dicen los maestros que la antropóloga Ames Russek es muy dura y falta de entendederas, que rompió las mesas de diálogo y, en lugar de buscar consensos, ya envió a la base trabajadora un documento en donde los amenaza que se van a suspender los pagos porque están tomadas las oficinas. Ana Belinda calentó el ambiente.
Líderes de cámaras y organismos empresariales ya empezaron a capitalizar sus relaciones con los diputados federales, con los diputados locales electos y con el presidente municipal electo Cruz Pérez Cuéllar, después del tiempo dedicado a los candidatos en la pasada campaña.
El lunes y martes pasados hubo varias reuniones de la IP con Pérez Cuéllar, así como con el diputado federal Juan Carlos Loera, líder moral de los diputados electos, que también asistieron a algunas de las reuniones.
Entre los encuentros destacaron, uno con el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), otro con Canacintra, uno más con Canaco, otro con Agentes Aduanales y uno más con representantes de organismos empresariales, encabezados por el desertor del CCE, José Mario Sánchez Soledad.
Todos los líderes empresariales anduvieron muy activos, amarrando proyectos con el próximo alcalde y los próximos legisladores en la cámara de diputados y el Congreso local. Se terminaron las elecciones, ahora a chambear por la ciudad, ese fue el estribillo utilizado por todos.
El martes se dio la reunión de los socios de Canacintra con todos los diputados electos de Morena y Cruz Pérez Cuéllar llamó la atención que en las elecciones los candidatos, hoy legisladores electos, no les hicieron mucho jalón a los empresarios y ahora hasta El Pichu de la Rosa andaba muy atento, tomando nota de las peticiones de los empresarios. Hasta Benjamín Carrera estuvo en esa reunión, y eso que todavía no es oficial que será diputado local.
La reunión de Cruz Pérez Cuéllar con los miembros de Canaco fue muy tersa, pese a que Rogelio González Alcocer y muchos otros empresarios se decantaron abiertamente por Javier González Mocken, excandidato del PAN a la presidencia municipal. No hubo reclamos por parte de la gente de Cruz, solo se dejaron querer, en especial el alcalde electo.
Pese a que hubo reunión del CCE con los actores políticos antes mencionados, los líderes de cada cámara y el organismo empresarial quisieron tener su propio encuentro con los que ocuparán cargos de elección popular y crear los conductos para llevar agua a su molino los próximos tres años.
El Lienzo Charro se cae a pedacitos, pero todavía aguanta para que funcionarios municipales organicen ahí fiestas y reuniones para sacar el estrés, y echar al viento uno que otro palomazo y por qué no, unas cervecitas y unos tequilitas.
En días pasados, los regidores Carlos Ponce Torres, Amparo Beltrán, Magdaleno Silva, Alfredo Seañez y otros, fueron captados en una fotografía disfrutando del salón recién remodelado del Lienzo Charro, mientras que el inmueble poco a poco se va deteriorando, sin que el Cabildo haga algo para exigir al municipio, en especial a la Dirección del Deporte que dirige Paco Ibarra, para que rescaten la propiedad que es ícono de la charrería en Juárez.
Las fuentes de Mirone aseguran que la fiesta la organizó el regidor Ubaldo Solís y todos se ven muy felices, cantando y disfrutando de las bebidas espirituosas. Los usuarios del Lienzo opinan que no hay atención de quien debe cuidar y preservar el inmueble y el patrimonio de la ciudad, menos hay inversión, pero si lo utilizan para sus francachelas.
Los espaciosos jardines y palapas del conjunto recreativo Las Fuentes, fueron elegidos por el diputado federal Juan Carlos Loera para invitar a una comida de agradecimiento a los abogados que le mostraron apoyo durante su campaña por la gubernatura.
Loera todavía trae vuelito económico de la campaña, y agasajó a los abogados con unos buenos cortes T-bone, unas Ultras para la sed y un tequila Don Julio para los que no les gusta la cerveza. A la comilona de agradecimiento asistieron más de 60 invitados y los diputados electos, fieles seguidores de Loera.
Después del agradecimiento de Juan Carlos a los abogados que participaron en la jornada electoral, le dio el uso de la voz a la diputada electa plurinominal Adriana Terrazas Porras y a Cuauhtémoc Estrada.
La expriista causó algunos sentimientos y miradas de envidia de algunos de los presentes, entre ellas la de Lety Ortega, que no podía creer que la advenediza Terrazas Porras tuviera el uso de la voz en una reunión de morenos.
La síndica Ortega estuvo así al borde del infarto. María Antonieta Pérez también mostró ceños fruncidos, pero no le quedó muy bien, porque cojea del mismo pie. Loera dejó abierta la puerta a los abogados para lo que venga. No se da por derrotado.
Trascendió que en la reunión de Adriana Fuentes, de la que Mirone dio cuenta aquí en este espacio, La Güera se aventó el clásico speech político. “Vienen buenos tiempos, voy a empezar a trabajar en un área donde podré ayudar a mucha gente, voy a hacer muchas gestiones y en tres años seguiremos con el proyecto. Yo estaré al lado de una gran mujer, que sin duda será una excelente gobernadora”. ¡Órale!
Las fuentes mironianas aseguran que a la reunión acudieron poco más de cincuenta priistas, entre ellos excandidatos a diputados locales, regidores, síndicos y algunos expresidentes del PRI local, como Wilfrido Otto Guillermo Campbell Saavedra mejor conocido como “Willy”.
Adriana les reveló a los presentes que ella y todos los candidatos en el concluido proceso electoral habían sido víctimas de una gran traición por parte de las dirigencias nacionales, estatales y, vaya sorpresa, de la municipal también, cuando de todos es sabido que a Jaime Cano ella lo propuso.
Algunos de los asistentes con más colmillo político, sin ser parte del equipazo de La Güera, comentó a los que lo acompañaban en la mesa que a Adriana le siguen faltando tablas políticas, porque es muy pronto para destaparse y es muy malo que hable de traiciones sin pruebas.
Todo indica que, en el partidazo tricolor, se les avecinan un sinfín de conflictos internos. Todos quieren algo de las migajas que les dejaron esta y las anteriores derrotas, pero nadie parece promover la unidad y el trabajo de reconstrucción.