MANTENTE PROTEGIDO DE LA DISFAGIA ANGÉLICA SANDOVAL
La disfagia es la dificultad para tragar, es decir, cuando la persona tiene problemas para transportar los alimentos o los líquidos de la boca al estómago; le lleva más tiempo y esfuerzo.
Sonia Georgina Noyola Cedillo, especialista en Gastroenterología en Torreón, dice que la disfagia puede ocurrir a cualquier edad, aunque la prevalencia se incrementa con la edad e impacta negativamente en la calidad de vida de las personas.
¿Cómo se presenta?
La experta, explica que la disfagia se clasifica en:
1.Disfagia orofaríngea (o alta) causada por un problema de deglución y puede estar relacionada con trastornos neurológicos, alteraciones músculo esqueléticas y algunos tipos de cáncer. Aquí, se dificulta el paso de los alimentos sólidos y líquidos desde el momento en el que inicia el proceso deglutorio.
2.Disfagia esofágica o baja puede ser un trastorno de motilidad o una lesión mecánica obstructiva. En ella, existe una alteración en la fase esofágica que se relaciona con el paso de los alimentos hacia el estómago.
“Le sucede mucho a las personas de la tercera edad porque ya no coordinan, el tubo digestivo también envejece y vienen los problemas para deglutir”, añadió.
La doctora dice que el tratamiento para esta enfermedad depende de la causa que lo provoque y que el diagnóstico se basa en el historial clínico del paciente y también en una exploración física detallada. Es importante recibir atención médica para prevenir casos de deshidratación, pérdida de peso, complicaciones pulmonares por aspiración, por mencionar algunos.
Pon atención
Los síntomas de la disfagia pueden ser: dolor al tragar, acidez estomacal frecuente, imposibilidad de tragar, tos mientras se come, sensación de que la comida se atasca en la garganta y/o en el pecho, babeo y voz ronca, entre otros.
“La disfagia todo mundo se la quiere manejar inmediatamente porque no pueden dejar de tragar, eso provoca angustia, se tiene que hacer una endoscopia incialmente para ver qué grado de estenosis tiene. No puedes dejar de atenderlo, es inmediato el tratamiento”, detalló la especialista.
La esperanza
Noyola Cedillo, agregó que una manera de prevenir la disfagia, es adoptando buenos hábitos alimenticios, además de que es necesario modificar la consistencia de los alimentos y las bebidas; es importante administrarlos para tomarlos en pequeñas cantidades y así poder tragarlos con mayor facilidad. Otra recomendación, es realizar actividad física.
Especialistas de la Universidad de Nueva York (NYU) consideraron necesario promover ejercicios para los músculos de la garganta en personas adultas, ya que confirme pasan los años se puede desarrollar disfagia, dificultad para pasar alimentos.
La pérdida natural de masa y función muscular no sólo se presenta en brazos, piernas y otras partes del cuerpo; también se da en músculos de la garganta.
Sonja Molfenter, especialista de la NYU, dirigió una investigación en la que encontró que a medida que ocurre la pérdida de músculo y, en consecuencia, la función de la garganta, se produce una constricción al tragar la comida.
Esto aumenta las posibilidades de que los alimentos se queden en la garganta, agregó la académica.
La investigación buscó explicar las razones por las que 15 por ciento de las personas mayores experimentan disfagia, lo que puede llevar a presentar problemas de salud como desnutrición, deshidratación y neumonía, entre otros.
“La disfagia tiene graves consecuencias para la salud y la calidad de vida. Por eso, esta investigación establece la necesidad de programas de ejercicios para adultos mayores que se dirijan a los músculos de la garganta”, destacó.
El estudio fue financiado por el Instituto Nacional de Sordera y Otros Trastornos de la Comunicación.
Molfenter y su equipo de trabajo constataron que la disfagia en adultos mayores es relevante, ya que se estima que para el año 2030 este problema de salud aumentará hasta 20 por ciento tan solo en los Estados Unidos.