Por: EFE
Policías de Bolivia detuvieron a cinco hombres acusados de abusar de una joven mujer. La identificación de estos rufianes se dio gracias a un video que empezó a circulas en las redes sociales de España.
El director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen de la Policía Boliviana, coronel Gonzalo Medina, relató en conferencia de prensa en la ciudad boliviana de Santa Cruz, donde ocurrieron los hechos, que la agresión se produjo en el Carnaval de 2016.
La joven fue ultrajada por miembros de esta pandilla y dos de ellos grabaron imágenes de la agresión, que recientemente fueron difundidas desde Madrid en redes sociales, indicó Medina.
Al parecer, un miembro del grupo que reside en la capital de España difundió el video a través de WhatsApp, según recogen medios bolivianos.
El ministro de Gobierno (Interior) de Bolivia, Carlos Romero, expresó en la comparecencia ante los medios su preocupación por este nuevo caso de violación grupal en Bolivia:
[En el que una mujer es tratada] como si no fuera un ser humano, como si fuera un objeto de distracción».
Romero indicó que la Policía actuó con rapidez tras detectarse el vídeo en redes sociales, para identificar a los supuestos autores, de los que destacó que forman parte de un «grupo juvenil».
La Fiscalía boliviana abrió el pasado jueves una investigación de oficio para identificar a los supuestos implicados a través de las imágenes, en las que se observan algunos rostros y tatuajes.
Justamente fue en Santa Cruz, la mayor ciudad de Bolivia, donde el año pasado salió a la luz un caso con características parecidas, que se conoció como «la manada boliviana», al evocar un suceso similar en España.
En ese caso la víctima fue una joven de 18 años que fue agredida por cinco de sus amigos, uno menor, en un motel de la ciudad cuando varios de ellos estaban bajo los efectos de varias drogas, según pericias judiciales que se hicieron públicas.Aquel suceso derivó en que los cinco señalados fueran enviados a la cárcel y a un centro de reclusión para menores, mientras prosigue un entreverado proceso judicial.