Eduardo Arredondo Delgado
Julimes, Chih.- Las aguas termales y los balnearios son parte de su atractivo y más para el turismo extranjero, ávido de novedosas experiencias, principalmente las del género ecológico.
Las aguas termales que fluyen en estos balnearios ya han sido consideradas benéficas para males como el reumatismo y la artritis. Oscilan los 40 grados y contienen material azufrado, que ayuda al cuerpo humano en la relajación muscular y mental. Y año con año los balnearios son visitados periódicamente no solo para disfrutar de merecidas vacaciones sino que ahora el explorador tiende más allá: encontrar una práctica curativa de primera mano.
En lo general, los balnearios cuentan con con asadores, palapas y mesas de cemento para realizar algún días de campo exprés. Los chapoteaderos y albercas cuidadas, limpias provocan en el visitante una grata experiencia, por lo que el entretenimiento está asegurado.
Fue en el siglo XVI cuando esta población se fundó y el territorio es recordado por las andanzas de los conchos, tribu que dejó una huella indeleble en el estado de Chihuahua.
El ecoturismo se convirtió en un plan obligado en aquellos que prefieres reencontrarse con la naturaleza.
A poco más de una hora, se puede encontrar una gama de ofertas de entretenimiento al natural.
