Por: New York Times
No hay duda de que tener un bebé y cambiar de ser una pareja a ser una familia requiere bastantes ajustes. Pero la investigación muestra que el periodo de ajuste tras un segundo hijo por lo general no dura tanto.
Para la mayoría de parejas, el primer mes es el más difícil, pero en un plazo de cuatro meses, la calidad del matrimonio debería haber vuelto a ser la misma que antes del nacimiento del segundo hijo.
Al igual que en muchos aspectos del matrimonio, una buena comunicación es clave. Más importante que dividir las responsabilidades del cuidado de los hijos es hablar claramente sobre quién hará qué, además de trabajar juntos para encontrar soluciones a los problemas que surjan. Contar con una red de respaldo de familiares y amigos también ayuda.
Pero incluso las parejas que se enfrentan a una transición difícil, y experimentan una mayor alteración en sus vidas cuando tienen un segundo hijo, de cualquier forma ya han vuelto a la «normalidad previa al bebé» al cuarto mes tras el parto, muestran los estudios.
Haber explorado la paternidad y la maternidad la primera vez puede darle la confianza que necesita para ampliar su familia. Y cierta planificación por adelantado sobre cómo se las arreglará después de la llegada del segundo bebé hará que el proceso de convertirse en una familia de cuatro sea más fácil.
Tenga en cuenta que encontrar formas de manejar la logística de un nuevo bebé y de ayudar a su primer hijo a ajustarse al nuevo miembro de la familia también ayudará a aliviar el estrés que tanto usted como su cónyuge podrían sentir en este periodo.