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Los Juegos Olímpicos de París 2024 arrancaron con una ceremonia inaugural celebrada en el río Sena de París que contó con caballos mecánicos, Lady Gaga y María Antonieta. Los telespectadores disfrutaron de un espectáculo en el que el Sena funcionó como un gran escenario, con actuaciones en puentes y tejados.
La Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, publicó en X que el evento celebraba «la cooperación mundial, la solidaridad, la equidad y la perseverancia atlética».
El Canciller alemán, Olaf Scholz, calificó la ceremonia de «única» y deseó suerte al equipo olímpico alemán en sus próximos Juegos.
Justin Trudeau, Primer Ministro de Canadá, elogió la actuación de la cantante canadiense Celine Dion, que calificó de «inolvidable».
Reacciones de contraste en los medios y redes sociales
En otros lugares, las críticas a la ceremonia no fueron tan positivas. Numerosos usuarios de las redes sociales calificaron la ceremonia de «bizarra» y criticaron la decisión de celebrarla en el río Sena en lugar de en un estadio, donde se celebra tradicionalmente.
Una de las reseñas de la ceremonia del diario británico ‘The Guardian‘ la calificó de «irregular» y señaló que la lluvia, que se prolongó durante varias actuaciones, supuso una distracción.
El diario estadounidense ‘The New York Times‘ resumió el espectáculo en un titular que decía «La Ceremonia de apertura pierde el tren».
En Francia, el diario ‘Le Monde‘ afirmó que el director del espectáculo, Thomas Jolly, había presentado «un espectáculo envolvente en una capital transformada en un gigantesco escenario».
El derechista ‘Le Figaro‘ fue más crítico, afirmando que parte del espectáculo era «demasiado» y dijo que una recreación de La Última Cena de Jesús y sus apóstoles delante de un desfile de moda era «innecesariamente provocativa».
