Historia de Cerocahui, poblado de la Sierra Tarahumara
Antes de la llegada de los jesuitas en el siglo XVII, este lugar era habitado solo por tarahumaras, justo aquí, en este promontorio plano que mira hacia la portentosa Barranca de Urique.
Nicolás Triedo
En 1679, el jesuita Padre Pecoro llegó a la región para tratar de cristianizar a los rarámuris, pero estos, según el padre jesuita, no estaban listos para aceptar la fe, como en muchos otros casos en la Sierra Tarahumara la evangelización en Cerocahui naufragó sin remedio, entonces eran comunes los alzamientos tarahumaras contra las imposiciones coloniales.
Un año después, en 1680, tuvo que llegar hasta aquí Juan María de Salvatierra, el misionero jesuita que desde Loreto, en Baja California —donde fundó la primera misión de la península en 1697—, fue abriendo las primeras brechas hacia la Alta California.
Salvatierra construyó entonces, en 1680, la iglesia de la misión de Cerocahui y permaneció en la región por un lapso de diez años, hasta que en 1691 fue nombrado Visitador de las Misiones de Sonora y Sinaloa, donde alcanzó al Padre Eusebio Kino que ya llevaba entonces algún tiempo en la zona evangelizando a los naturales de la región.
Nicolás Triedo
A la expulsión de los jesuitas de la Nueva España en 1767, la misión de Cerocahui fue cerrada y abandonada, y hoy solo se conoce que no fue sino hasta 1936 que los jesuitas regresaron aquí, el Padre Andrés Lara fue el misionero en turno, y se dedicó entre otras cosas a reconstruir la misión y la iglesia.
Tras ser un montón de escombro, un par de décadas después, el templo y la misión estuvieron terminadas y totalmente restauradas. En 1941, el Padre Lara también construyó el internado para niñas rarámuris que hasta hoy sigue funcionando.
En 1961 fue inaugurado el ferrocarril Chihuahua al Pacífico (Chepe) con lo cual la localidad tuvo finalmente su primer transporte público. En 1968, fue inaugurado el hotel Misión que se erigió en lo que fuera la misión jesuita en la Sierra Tarahumara.
Hoy es posible visitar la iglesia que se alza frente a un bello atrio con su cruz parroquial, en este se encuentra asimismo un busto del Padre Lara.
El Cerro del Gallego en la Sierra Tarahumara
A solo unos 45 minutos de Cerocahui se encuentra lo que es quizá el mejor mirador de las Barrancas del Cobre junto con el Divisadero, desde aquí las vistas de la Barranca de Urique son simplemente espectaculares.
Esta barranca es la más alta de la sierra con sus 1879 metros de altura. En el lugar se han acondicionado asadores, palapas con mesas para días de campo, baños y estacionamiento, y además cuenta con un espectacular puente colgante, y tiene además unas fantásticas terrazas voladas sobre la barranca que regalan sensaciones inauditas.
Al fondo de la barranca se divisa el río Urique, y también el pueblo minero de Urique, que hoy con el decaimiento paulatino de la producción minera ha devenido en un pueblo aletargado, suspendido en el tiempo, solo algunos gambusinos continúan buscando algo de oro, y el resto de la población se dedica a la agricultura y la ganadería.
Cómo llegar a Cerocahui
Para llegar a Cerocahui hay que arribar primero, ya sea en automóvil o en el tren Chepe, hasta la comunidad de Bahuichivo, una vez allí, por un camino de buena terracería se accede después de un recorrido de 17 kilómetros a la pequeña comunidad de Cerocahui. Desde el pueblo existen varios guías y servicios que ofrecen las excursiones hacia el Cerro del Gallego en la Sierra Tarahumara.