POR AP
WASHINGTON (AP) — En una dramática procesión hacia el otro extremo del Capitolio, los líderes demócratas de la Cámara de Representantes llevaron el miércoles los cargos formales de juicio político contra Donald Trump al Senado, estableciendo las bases para apenas el tercer proceso para destituir a un presidente en la historia de Estados Unidos.
Trump se quejó nuevamente de que todo era una “farsa”, incluso después de que surgieron nuevos detalles sobre sus interacciones con Ucrania.
La caravana simbólica de legisladores que fungirán como fiscales en el caso contra Trump llevó el proceso de la Cámara de Representantes, de mayoría demócrata, al Senado, bajo control republicano, donde el equipo del presidente trabaja en una defensa que obtenga una absolución rápida.
“Hoy haremos historia”, dijo la presidenta de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi mientras firmaba las actas, utilizando varias plumas que después entregó para conmemorar el evento. “Este presidente tendrá que rendir cuentas”.
Poco después, los legisladores que fungirán como fiscales caminaron solemnemente por el recinto, llegando a la última fila del Senado mientras la oficial mayor de la cámara baja anunciaba su arribo: “La Cámara Baja ha aprobado la Resolución 798, designando y autorizando a los gestores en el juicio político de Donald John Trump, presidente de Estados Unidos”.
El Senado se transformará en un juzgado a partir del jueves. La Constitución exige que el presidente de la Corte Suprema John Roberts lleve el proceso, tome juramento a los senadores que fungirán como jurado y jurarán “justicia imparcial”.
El juicio se realizará en el marco de una nación profundamente dividida al inicio de un año electoral, en momentos en que Trump busca la reelección y los votantes evaluarán su mandato. Tres senadores aspiran a la nominación presidencial demócrata.
El líder de la mayoría en el Senado Mitch McConnell prometió que su cámara “estará por encima del mezquino faccionalismo” y del “fervor de las facciones para cumplir con lo que más convenga a nuestra nación a largo plazo”. Describió el proceso como “un momento difícil para nuestro país”.
Técnicamente, la cámara baja simplemente notificó al Senado de la entrega de los cargos, y el jueves se realizará una presentación más formal. Los argumentos de apertura están programados para el próximo martes, después del feriado por el día de Martin Luther King Jr.
Horas antes, la cámara baja votó 228-193 a favor de entregar los cargos, una votación en bloques partidistas que refleja la división en el país.
La Cámara de Representantes aprobó el juicio político contra Trump, acusándolo de abuso de su autoridad presidencial al solicitarle a Ucrania iniciar una investigación de su rival demócrata, Joe Biden, utilizando un fondo de ayuda militar como herramienta de presión. El mandatario también está acusado de obstruir la subsecuente pesquisa del Congreso.
“De esto es de lo que trata un juicio político”, dijo Pelosi antes de la votación. “El presidente violó su juramento, socavó nuestra seguridad nacional, puso en riesgo la integridad de nuestras elecciones”.
La campaña política de Trump tildó las labores de la cámara baja como “sólo un intento fallido de perjudicar políticamente al presidente Trump de cara a su reelección”.
El republicano de mayor rango en la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, dijo que los estadounidenses recordarán esta “triste saga” que intentó destituir al presidente con el “argumento más endeble”.
El equipo de Trump prevé que sea absuelto en el Senado en un juicio que no duraría más de dos semanas, según un alto funcionario del gobierno que habló bajo solicitud de anonimato a fin de discutir el tema.