POR: LUCY SANABRIA
Mientras leemos en las noticias sobre violencia y el fortalecimiento del crimen organizado, cerca de dos mil armas ingresan de manera ilegal a nuestro país por la frontera con Estados Unidos, dio a conocer Renato Sales, comisionado Nacional de Seguridad.
En una conferencia organizada en el Encuentro Académico sobre Prevención de la Violencia Armada y Delitos Relacionados con Armas de Fuego, en el Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la UNAM, Renato Sales explicó que el ingreso de estas armas es diario y esto incrementa el poder “letal” de la delincuencia organizada.
Además, es una de las razones del incremento de homicidios con arma de fuego en México —que pasó de tres de cada 10, en 2016, a siete de cada 10 en este año—.
De Estados Unidos para México
“Estados Unidos cuenta con la mayor cantidad de armas en el mundo, tiene más armas que habitantes”, expuso y detalló que son más de 300 millones de armas, la mayor parte “se concentra”en estados de la frontera como California, Nuevo México, Arizona y… Texas.
Y por su proximidad con México —sin contar con los “operativos” de seguridad en la frontera— no resulta una tarea difícil, como es el paso de migrantes hacia Estados Unidos.
En fin, para que no existan más casos como el de “Rápido y furioso” —que sucedió en la gestión de Felipe Calderón—, Sales explicó que ya se presentó un programa para formar un grupo binacional con la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF por sus siglas en inglés) y con la Oficina Federal de Investigación de Estados Unidos (FBI) para que compartan información y logren una mejor coordinación en las tareas de seguridad.
Porque todo transita en la frontera México-Estados Unidos: armas, dinero ilegal, drogas y hasta personas, bajo el delito de trata.
“Es irónico, pero es mucho más sencillo comprar un arma larga que un jarabe para la tos: para adquirir el jarabe se requiere receta médica y para un arma, nada”, comparó Renato Sales.
Grupos delincuenciales
Con el paso de las armas ilegales, no sólo se alimenta la delincuencia organizada sino también la delincuencia común, intervino Sara Irene Herrerías, subprocuradora de Derechos Humanos, Prevención del Delito y Servicios a la Comunidad de la PGR.
Los homicidios van en aumento y el gobierno Federal tendría que contener esta situación —bueno, el de EPN ya no, porque va de salida y le queda menos de un mes para seguir en funciones—. Entonces, ¿cuáles serían pasos o la política de seguridad apropiada?
Desnormalizar la violencia
Como las relaciones bilaterales entre México y Estados Unidos va para largo, una de las medidas para atacar el problema de la violencia es a través de la prevención.
“No sólo implica desarmar, sino ‘desnormalizar’ el uso de armas de manera integral”, agregó en su participación Nashieli Ramírez, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México.
O aplicar la fórmula de Australia. David Engel, embajador de Australia en México, ejemplificó con el caso de su país al legislar la portación de armas de fuego en 1996, tras un ataque en Port Arthur —donde una persona asesinó a 35 e hirió a 18 personas—.
El control pide que para obtener un arma se debía tramitar un permiso —en una evaluación de 28 días, se creó el sistema nacional de registro de armas de fuego y un programa de recompra de armas —financiado con un gravamen que pagaron todos los contribuyentes— y en el cual la ciudadanía entregó alrededor de 624 mi armas.
Esas son algunas opciones para el gobierno que está por entrar y que buscará contener el flujo de armas de fuego y la violencia, no sólo en la frontera de México, sino en todo su territorio.
**Foto de portada: Getty Images.