Durante una actividad sobre el calentamiento global en una antigua central eléctrica a carbón, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, aseguró este miércoles 20 de julio que el cambio climático es «un peligro claro e inmediato” que pone en riesgo «la salud de nuestros ciudadanos y nuestras comunidades”. Y agregó que este fenómeno supone una «amenaza existencial para nuestra nación y el mundo”.
Hasta ahí todo bien. La confusión se desató cuando Biden empezó a hablar de su infancia cerca de una refinería de petróleo en Claymont, Delaware. «Por eso es que yo y tantas otras personas con las que crecí tienen cáncer y por qué Delaware tuvo las mayores tasas de cáncer del país”. La frase generó inmediatos rumores sobre el estado de salud del mandatario. Mientras unos sospechaban que se trataba de un aviso a la ciudadanía, otros especulaban con un lapsus o una tardía referencia al hecho de que Biden efectivamente ha sido tratado contra el cáncer de piel.
Terminado el discurso en Somerset, Massachussets, la Casa Blanca debió salir rápidamente a responder las preguntas de los periodistas, explicando que el mandatario se refería a esos tratamientos, a los que fue sometido antes de asumir el mando. Además, remitió al informe de salud más reciente, que data de noviembre de 2021, en el que se señala que Biden está en óptimo estado. «El presidente es apto para el deber para ejercer plenamente sus responsabilidades”, sentenció entonces O’Connor.
En ese informe, el médico tratante del mandatario, Kevin O’Connor, señaló explícitamente que Biden no sufría ningún tipo de cáncer, y los no-melanomas que se le detectaron en la piel fueron atribuidos a la exposición al sol antes que a los químicos usados por la industria del petróleo. «Se sabe que el presidente Biden pasó buena parte de su tiempo expuesto al sol en la juventud”, escribió O’Connor, en referencia al hecho de que el presidente fue salvavidas.
Los lapsus de Biden son conocidos en todo el mundo, y muchos opositores en su país han intentado poner en duda su capacidad para gobernar, aludiendo a estos gafes y a su edad (79 años). Los defensores del mandatario, sin embargo, responden que el político es conocido por ese tipo de salidas de libreto, y ha sido siempre igual a lo largo de su carrera.
Beau Biden, hijo del mandatario, falleció en 2015 a causa de un cáncer cerebral. En 2017, Joe Biden creó una fundación para promover la lucha contra el cáncer y buscar tratamientos más efectivos.
DZC (New York Post, Semana, EFE)