JIRONES DE NUESTRA HISTORIA
BAHÍA DE ACAPULCO 1822, FONDEAN 25 NAVÍOS DE LA ARMADA CHILENA CON 6000 SOLDADOS A BORDO, ¿ACASO PRETENDÍAN INVADIR A MÉXICO? O ¿A QUÉ VENÍAN? . HISTORIA MUY OCULTA DE MÉXICO.
Por: José Luis Jaramillo Vela
Un poco de contexto acerca de Chile y su flota naval
En 1817, Chile ya se había independizado de la Corona Española, los Generales Bernardo O’ Higgins Riquelme, José de San Martín y Matorras, Antonio José de Sucre y Alcalá y Simón Bolívar Ponte y Palacios, liberaron no solo a Chile, sino a Ecuador, Bolivia, Venezuela, Argentina y Colombia e iban por la liberación de Perú. Debido e estos actos, se les llamó los Libertadores de América.
Para el General Bernardo O´Higgins, presidente de la nueva República de Chile, era de primordial importancia vigilar, proteger y salvaguardar los 4570 kms de litoral chileno en el Pacífico Sur, además de los cientos de islas y fiordos en su territorio patagónico; por lo tanto su preocupación principal era contar con una flota naval y personal capacitado para esa enorme labor, debido a que a lo largo de sus costas y fiordos navegaban aún naves de la Armada Española y una gran cantidad de piratas, que sabían ya que todo ese litoral estaba desprotegido y que la Armada Española, al ya no tener jurisdicción, había ido concentrado su flota en el Puerto de El Callao en Perú, que aún les pertenecía.
Mientras, en Londres, Inglaterra y ajeno a todo lo que sucedía en Chile, estaba el Almirante Thomas Alexander Cochrane X Conde de Dundonald y Marqués de Maranao, héroe de mil batallas navales, discípulo favorito del legendario Almirante Horatio Nelson, quien lo bautizó como “El Lobo de los Mares” y que había vencido a Napoleón en la Batalla de Trafalgar, destrozando y acabando con la Armada Francesa. Pero además de su audacia, su arrojo y su valentía, Cochrane era un tipo de trato muy difícil y eso le ganaba varias enemistades, como la de su superior, el Almirante James Gambier, a quien acusó públicamente de falta de apoyo para hundir la totalidad de los buques franceses; esto le valió ser expulsado de la Armada Inglesa.
Decidió incursionar en la política y fue electo miembro del Parlamento, donde se ganó la enemistad de varios políticos muy experimentados; fue acusado, hallado culpable y condenado por el fraude a la Bolsa de Valores de Londres; fue encarcelado por un año, expulsado del Parlamento y despojado de sus títulos nobiliarios. Ahora Cochrane ya no tenía nada, pero justo en ese momento se le acerca el General José de San Martín, con una propuesta muy interesante…
El General José de San Martín se reúne con Cochrane en Londres, le muestra un documento que lo acredita en representación del Gobierno de Chile y le dice que el Director Supremo de Chile (no le llamaban Presidente), General Bernardo O’ Higgins lo considera un gran marino y el mejor Almirante y le ofrece crear, organizar y comandar a la Armada Chilena. Entonces Cochrane, quien ya no tenía opciones en Inglaterra, acepta sin dudarlo ni pensarlo, y decide irse a esta nueva aventura.
Para irse a Chile, Cochrane rehusó primero la oferta previa que le hizo el Rey Fernando VII de España, para hacerse cargo como Almirante General de la Real Armada Española, por no estar de acuerdo con los procedimientos de España. Pero cuando Cochrane llega a Chile, se da cuenta de que la incipiente “Armada Chilena” era un desastre, conformada por piratas, corsarios y delincuentes sacados de las prisiones para servir como marineros, sin ningún tipo ni de disciplina ni de orden y mucho menos de espíritu de cuerpo naval.
Cochrane solicita a O’ Higgins la destitución del Almirante Manuel Blanco Escalada, para hacerse cargo por completo y reorganizar desde cero a ese cuerpo naval, el Almirante Cochrane, como era de esperarse se rodea de un Estado Mayor Naval conformado por almirantes y capitanes ingleses y crea una extraordinaria y eficiente fuerza naval chilena, a la que oficialmente se le llamó “Escuadra Naval de Chile” pero la Armada tenía un defecto muy notorio…el mismo Cochrane y su forma de ser.
¿Qué sucedió en Perú para que la Escuadra Naval de Chile terminara en México?
El gobierno del General Bernardo O´Higgins había invertido muchos recursos para levantar una escuadra naval chilena, que le diera seguridad a sus 4570 kms de costas, litorales y fiordos; O´Higgins ordena a Cochrane unir a las fuerzas navales chilena y argentina, para ayudarle a Perú a independizarse de España, quedando el General José de San Martín al mando de los ejércitos de mar y tierra para liberar a Perú, algo que ya de entrada no le gustó a Cochrane, pero se disciplinó.
La actuación de Cochrane y la Escuadra Naval de Chile, fueron fundamentales para lograr la independencia de Perú y aquí comenzaron los problemas; el primero era que todos los altos mandos de la flota chilena, eran ingleses traídos por Cochrane y desde luego leales a él, de modo que cuando el General José de San Martín trató de incrustar al Almirante argentino Bernardo de Monteagudo en la armada chilena, Cochrane se rehusó, alegando que le querían “argentinizar y peruanizar” a la fuerza naval chilena.
El segundo problema fue que el gobierno chileno se había retrasado en los pagos al personal de la Escuadra Naval y Cochrane temiendo un motín, incautó una goleta en la que sabía que el General San Martín guardaba dinero público del gobierno chileno y de ahí tomó el dinero suficiente para cubrir los sueldos de sus marineros, ocasionando el rompimiento con San Martín, a quien le dijo que lo consideraba un ser con un intelecto militar inferior y que ahora solo obedecería a su jefe supremo, el General O´Higgins, abandonando con toda su flota las costas peruanas bajo el pretexto de ir en busca de navíos españoles que habían escapado.
El General José de San Martín boletina a Cochrane a todos los gobiernos, declarándolo en rebeldía, insubordinación y fuera de orden.
La Escuadra Naval de Chile aparece en México, provocando tensión, recelo y alarma
A principios de 1822, habitantes y pescadores de las costas de Oaxaca reportan a las autoridades haber avistado a una flota de buques de guerra con bandera desconocida para ellos; de inmediato se ponen en alerta, pues no se sabía si eran piratas, o buques de la Armada Española o qué estaba pasando, causando inquietud en la población de las costas de Oaxaca y Guerrero. Llegan a la Bahía de Acapulco y nadie sabe qué andan haciendo ahí, a 8000 kms de Valdivia, Chile, en aquel entonces sede de la Escuadra Naval de Chile; el Almirante Cochrane envía una lancha con
una delegación, pero son hechos prisioneros por el General Juan Álvarez, Comandante General y Gobernador de Acapulco, quien desea interrogarlos para saber quiénes son, de donde son y qué están haciendo en aguas mexicanas.
Cochrane envía otra delegación para decirle al General Álvarez que necesitan provisiones y agua para seis mil hombres y que si no es atendida su solicitud, arrasarán al Puerto de Acapulco, al mismo tiempo que formó a toda su flota en posición de ataque con todos los cañones apuntando al Puerto y al Fuerte Militar; Álvarez por su parte, reúne a todas las tropas disponibles ante lo que para él era una invasión de los chilenos, notificando de la situación al Emperador Agustín de Iturbide, quien desde la Ciudad de México y al frente de una numerosa tropa, se dirige hacia Acapulco, cabe recordar que México tenía unos cuantos meses de haber logrado su independencia, por lo que no contaba aún con una fuerza naval, pero sí con un numeroso ejército terrestre.
Al llegar Iturbide a Acapulco ordena que lleven a Cochrane ante su presencia, ahí, Iturbide le ordena de manera tajante que baje todos los cañones que están apuntando al puerto y le suelta la primera pregunta: “¿qué están haciendo en aguas mexicanas?”, el Almirante Cochrane le dice que vienen siguiendo desde El Callao en Perú a un bergantín español pero que a México han llegado en son de paz; Iturbide le responde que es difícil creer que una fuerza naval de ese tamaño ande navegando en son de paz, además de que es una movilización exagerada para perseguir a un bergantín.
Cochrane insiste en que vienen en son de paz y que solo necesitan agua, harina y tasajo de res o carne seca; Iturbide ordena se les apoye con lo que necesitan, para que se vayan de ahí; el General Álvarez le dice que solo pueden ayudarlos con agua y harina, porque en Acapulco no se consume tasajo.
Mientras todo eso sucedía en tierra; en el mar todo el tráfico de marina mercante que venía desde Filipinas, Indonesia y China, conocido con el nombre genérico de “La Nao de China”, y que desembarcaba en Acapulco, estaba siendo desviado hacia el Puerto de Mazatlán, Sinaloa; de eso se dieron perfecta cuenta Cochrane y sus almirantes, quienes al zarpar de Acapulco, se deshacían en agradecimientos y abrazos hacia Iturbide y Álvarez, pero una vez en altamar, cual viles piratas comenzaron a atracar navíos mercantes que se dirigían a Mazatlán.
Cochrane decide ir hacia la Península de Baja California, puesto que le habían informado que estaba muy poco habitada; aquí es donde algunos historiadores creen que Cochrane sí venía con intenciones de invadir nuestro territorio, si se podía; En el trayecto, avistan las Islas Marías frente a las costas de Nayarit y al verlas solas, las ocupan y se establecen ahí por unos días. Mientras, toda la navegación mercante que circulaba por la zona, informaba a las autoridades de Mazatlán, sobre la ocupación de los chilenos en las Islas Marías y de los atracos que habían cometido en altamar.
Desde las Islas Marías, Cochrane decide ir a Panamá, pero envió a los almirantes Simpson, Wilkinson y Campbell al mando de varios buques a la Baja California a sondear el territorio, pero antes de llegar a San José del Cabo, Wilkinson atacó al navío mercante mexicano “San Francisco Javier”, haciendo prisioneros al capitán y toda su tripulación; esa misma noche atacó al pueblo de San José del Cabo, saqueó a la iglesia, la misión y atracó a los asustados pobladores.
Por su parte, Simpson y Campbell desembarcaron en Loreto, que en aquella época era la Capital del Territorio de Baja California, siendo recibidos con recelo, pero con amabilidad por el Gobernador José Darío Argüello y Don José María Mata.
De pronto, motines, caos, violaciones y saqueos
En un determinado momento que los Almirantes Simpson, Campbell y Wilkinson se descuidaron, los marinos chilenos se amotinaron y los dejaron en tierra junto con los marinos que se rehusaron a amotinarse y se llevaron las naves para cometer actos de piratería y saqueos en los pueblos costeros de Baja California; los amotinados pensaron que todo ese vasto territorio podría ser de ellos y llegaron arrasando puertos y pueblos costeros, teniendo los lugareños que esconder a las mujeres y niños, para enfrentar a los bandidos. Llegaron hasta San José en la Alta California y ahí si
los recibieron a cañonazos; al darse cuenta de que no iban a poder salir bien librados de ahí, optaron por regresar a la Baja California derrotados y diezmados.
Mientras en la Baja California, los Almirantes Simpson, Campbell, y Wilkinson junto con todos los que los amotinados habían dejado ahí, ante el desprecio de la gente que no les daba ni siquiera agua, mucho menos de comer, entonces se vieron obligados a robar y fueron hechos prisioneros por los pobladores; algunos los querían linchar, otros pedían soltarlos encadenados en el desierto y otros más pretendían arrojarlos al mar, pero sin embargo, prevaleció la cordura y sensatez del Gobernador José Darío Argüello, quien decidió que serían entregados a las autoridades de la Comandancia General de Guaymas, Sonora, para ser juzgados por la justicia mexicana.
En uno de esos días, en que se estaban preparando a los chilenos detenidos para ser enviados a Guaymas, aparecen en el horizonte marino los navíos amotinados, siendo recibidos por los enfurecidos habitantes, una tropa de soldados del Ejército Mexicano y los policías de los pueblos costeros, todos ellos dispuestos a no dejarlos desembarcar; los amotinados levantan una bandera blanca de rendición y envían una lancha con tres marinos, quienes preguntaron por los Almirantes y sus compañeros que habían sido abandonados; al saber que estaban prisioneros, pidieron al Gobernador Argüello si se los podían llevar, ya que ellos venían derrotados y diezmados de la Alta California y ya se iban de regreso a Chile.
Los prisioneros les fueron entregados para que se los llevaran; por alguna extraña razón, los chilenos ofrecieron sus “sinceras” disculpas y dijeron estar “muy arrepentidos” de sus actos y se fueron derrotados.
En realidad ¿a qué vino la Escuadra Naval de Chile a México?… hay diversas hipótesis
La verdad es que nunca se supo a ciencia cierta, el porqué de la presencia de esta fuerza naval en aguas mexicanas, la historia oficial de México tiene estos hechos en el más recóndito de los sótanos de la historia y solo se limita a decir que la flota chilena vino en apoyo a la Independencia de México, porque un personaje del Movimiento Insurgente viajó hasta Chile, para solicitar apoyo naval contra los españoles; pero la historia oficial, no dice nunca qué personaje es quien supuestamente solicitó la ayuda, ni en qué momento, eso no está documentado en ningún lado, ni en los registros históricos de México, ni en los de Chile y tampoco en las Memorias del Almirante Thomas Alexander Cochrane menciona nada de eso; por lo que muchos historiadores consideran que ese dato es inexistente y lo usa la historia oficial de México, para tratar de minimizar y/o esconder el tema,
La versión del Almirante Cochrane y que aparece en sus Memorias, es la de que venía en una misión para capturar algún navío de la Armada Española que pudo haber huído al consumarse la independencia de Perú; pero aquí surgen dos contradicciones: durante la independencia de Perú, Cochrane tenía dos mandos por encima de él; el General José de San Martín y el Presidente de Chile, el General Bernardo O´ Higgins, éste último no le dio esa orden y tampoco se la pudo haber dado San Martín puesto que al lograrse la independencia de Perú, ambos rompieron relación, incluso San Martín lo declaró en rebeldía, insubordinación y fuera de orden; entonces, si venía persiguiendo a algún buque español y no recibió ninguna orden superior, se puede pensar que estaba actuando por su cuenta.
Y si en caso de estar actuando por su cuenta, cayeron en actos de piratería y es posible entonces que Cochrane hubiese pensado en apropiarse de alguno de los territorios de cualquier país, porque antes de llegar a México, ancló en Ecuador y en Panamá.
Algunos historiadores, por su parte piensan que es posible que el Almirante Cochrane viniera con la venia de O´Higgins, para pulsar la realidad de México como país recién independizado, con la intención de sondear el grado de vulnerabilidad, pensando en una posible invasión. Todo es posible, pero sin pruebas concretas, todo es especulación.
Secuelas de la “visita”
+ Los chilenos dejaron ingratos recuerdos en la Baja California, pero se llevaron los peores recuerdos de la Alta California.
+ La incursión de los amotinados chilenos a la Alta California, dio origen a la “República de California” y exigieron su separación de México.
+ El Almirante Wilkinson desembarcó en una playa aledaña a San José del Cabo y la bautizó con el nombre de “Puerto Chileno”; el Gobierno Mexicano y el de Baja California Sur han respetado el nombre de esa playa, en donde hoy se levanta el imponente y lujoso “Hotel Waldorf Astoria Los Cabos”.
+ El Almirante Thomas Alexander Cochrane Gilchrist, participó y fue pieza fundamental en las batallas de independencia de Perú, Argentina, Brasil y Grecia.
+ El Almirante Simpson regresó a México en 1827, el Gobierno Mexicano lo designó como Comandante del navío “Congreso Mexicano”, después regresó a Chile, donde fue nombrado Comandante General de la Escuadra Naval de Chile; todos sus hijos fueron chilenos y todos obtuvieron el grado de Almirante.
+ En 1835, México y Chile establecieron relaciones diplomáticas de manera oficial; hasta el año 2018, las relaciones diplomáticas entre México y Chile, eran las más sólidas en Latinoamérica.
+ La Armada de Chile no menciona estos hechos en su historia.
Fuentes Bibliográficas:
+ biografiasyvidas.com
+ memoriachilena.gob.cl
+ lavanguardia.com
+ bbc.com
+ armada.cl
+ revistamarina.cl
+ es.wikisource.org
+ iih.tij.uabc.mx
+ archivonacional.gob.cl
+ memoriapoliticademexico.org
+ es.wikipedia.org