Autoridades de Luisiana detectaron un brote de COVID-19 (con un caso sospechoso de Ómicron incluido) en un crucero que hizo escala en México
Christian Vázquez
«Dios, somos nosotros de nuevo» Autoridades sanitarias de Luisiana detectaron un brote de COVID-19 en un crucero que viaja con rumbo a Nueva Orleans. Lleva poco más de 3 mil 200 pasajeros y se trata de una embarcación que hizo escala en México, así como en Honduras y Belice.
Se detecta brote de coronavirus en una embarcación con más de 3 mil 200 pasajeros
Norwegian Breakaway es el nombre del crucero que partió precisamente desde Nueva Orleans el pasado 28 de noviembre. Regresó a las costas de esa ciudad este 5 de diciembre y fue por ello que se le aplicó una prueba del virus a la tripulación y pasajeros.
El Louisiana Department of Health reportó inicialmente que 10 personas dieron positivo a COVID-19, y señaló que los casos se encuentran tanto entre la tripulación como entre los pasajeros.
Hay un caso sospechoso de Ómicron entre las personas contagiadas de COVID-19 en el crucero
Ahora bien, horas después de ese primer informe, el mismo Departamento de Salud actualizó la información y el número de casos aumentó. Siete personas más dieron positivo a COVID-19, además de que se reporta un caso sospechoso de Ómicron.
Como te comentaba, durante su viaje de una semana hizo escala en tres países: México, Honduras y Belice, por lo que resulta probable que los contagiados hayan tenido contacto con gente de esos lugares.
El caso sospechoso de la nueva variante no habría tenido contacto con gente de México
Pero eso sí, la persona sospechosa de tener la nueva variante descubierta en Sudáfrica (que ya provocó la cancelación de un evento anual muy importante en Brasil) es un miembro de la tripulación, por lo que se reporta que no abandonó el crucero en ningún momento del recorrido.
De acuerdo con los protocolos que se tienen en aquel estado estadounidense respecto a los casos positivos de COVID-19, las personas contagiadas deberán permanecer en aislamiento. Pueden hacerlo en sus casas (luego de ser trasladados bajo estrictos protocolos de seguridad) o en alguna residencia designada por las autoridades sanitarias o la empresa encargada del viaje.
No se informa con precisión en qué parte de México hizo escala este crucero, pero esperemos que no desencadene un brote de COVID-19 más grave tanto acá como en Honduras, Belice y la propia Nueva Orleans, especialmente por ese caso sospechoso de Ómicron.