Así es el fraude del pescado congelado que Profeco quiere que evites
La Profeco ha revelado la forma en la que las pescaderías engañan a los consumidores al venderles filete de pescado congelado.
¿Vas a comprar pescado para tu comida del día esta temporada? Antes de pagar y adquirir el producto debes checar esta información. La Procuradurí Federal del Consumidor (Profeco) revela el fraude del pescado congelado y cómo algunas pescaderías te engañan vediéndote algo que no es. Y para evitar más robos, descubre cuál es el costo real de un kilo de huevo según Profeco.
Y no tiene que ver con el sabor o calidad del pescado, sino más bien con el peso y robo al consumidor. Ya que así como existen negocios honestos, hay otros que buscan sacar provecho al engañarlo. Por ello, aquí sabrás cómo algunas pescaderías realizán el fraude de filete congelado esta temporada.
En el inicio del Operativo de Verificación y Vigilancia Cuaresma, la Profeco recomienda para esta temporada consumir producto nacional. Sobre todo porque se ha detectado en el país mucho pescado importado chino que contiene mucha agua.
¿En qué consiste el fraude del pescado congelado?
“Hay mucha Tilapia importada de China que la congelan con un sistema que se llama glaseado; es decir, le ponen una capa de hielo encima; entonces la gente piensa que está comprando un pescado muy económico pero la realidad es que hasta un 40% del peso es agua”, explica la Profeco. Y si quieres saber más del tema, checa cómo te engañan algunas pescaderías al venderte filete congelado.
Ante este hecho, La Profeco sugirió que para evitar este fraude es mejor buscar en el mercado las especies de mar que están de temporada. Como el pescado Barrilete y la Corvina, que son dos especies que están muy económicas en la Cuaresma y que tienen muy buen sabor. Así como también se puede comprar huachinango y otras especies con precios más accesibles y de buen sabor.
En el Operativo de Verificación y Vigilancia Cuaresma, tiene como propósito evitar abusos por parte de los proveedores. Y se enfocan en verificar preciadores a productos que no tengan precio exhibido, la colocación de decálogos de los Derechos del Consumidor en lugares visibles. Así como la calibración de básculas y otros instrumentos de medición para garantizar el despacho de kilos completos.
