- Los continuos cambios entre interiores y exteriores, las bajadas de temperatura y los fríos vientos pueden hacer que nuestra piel sea más vulnerable
Por la Dra. Fiorella Amutio Bove, académica de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG)
En la temporada invernal, es fundamental cuidar nuestra piel para evitar las enfermedades y condiciones más frecuentes que pueden afectarla.
Uno de los síntomas más comunes de una piel deshidratada e inflamada es la picazón o comezón.
Entre las afecciones más comunes en esta época del año se encuentran el eccema, la queilitis, la xerosis y la dermatitis atópica, entre otras.
¿Cuáles son las principales afecciones que puede padecer la piel a causa del frío?
Algunos de los principales trastornos que pueden afectar a la piel en invierno son:
- Dermatitis atópica: La dermatitis atópica es una enfermedad inflamatoria crónica caracterizada por episodios recurrentes de deshidratación e irritación de la piel, causados por factores como cambios climáticos, genética, alimentos, y cosméticos.
Aunque se presenta principalmente en la infancia, puede afectar a personas de cualquier edad.
Sus síntomas incluyen erupciones en pliegues, cara y cuero cabelludo, acompañadas de intensa comezón, que puede ocasionar sangrado y costras debido al rascado excesivo.
- Eccema: El eccema se manifiesta como enrojecimiento, descamación, engrosamiento de la piel y áreas húmedas o «llorosas». Puede aparecer en cualquier parte del cuerpo, siendo las manos y los párpados las zonas más afectadas.
- Queilitis: La queilitis es una inflamación de la zona labial que puede deberse a componentes alérgicos o friccionales. La forma más conocida es la queilitis angular, también llamada «boqueras», que aparece en las comisuras de los labios.