by GRETA PADILLA
La búsqueda del nuevo James Bond es uno de los temas más importantes dentro de la industria del entretenimiento. Y no es para menos, se trata de un personaje icónico con 60 años de historia y 25 producciones de alto perfil. En otras palabras, el actor que lo interprete pasa a la historia y por siempre será relacionado con dicho personaje.
Sean Connery catapultó su carrera al darle vida al agente 007, sumado a un sinfín de filme impresionantes. Pero por siempre será recordado como el primer James Bond en la historia. David Niven, George Lazenby, Roger Moore, Timothy Dalton, Pierce Brosnan y Daniel Craig sostuvieron al personaje por años… y ahora es momento de encontrar a otro Bond.
Cuando Craig anunció su retiro del personaje, comenzó la búsqueda y las especulaciones que ponían a Idris Elba y Tom Hardy en los primeros lugares para ser James Bond. Pero nunca se confirmó nada. La lista comenzó a crecer, y se hizo tan extensa, que incluso se dijo que un actor que no fuera británico podría interpretarlo…
Sin embargo, en los últimos días, los dedos apuntan a un nombre: Aaron Taylor-Johnson. ¿Suena bien? En realidad, suena genial. El actor tiene 32 años, una edad ideal para tomar al personaje (Craig, por ejemplo, lo tomó a los 38 años) y explorarlo desde una edad más temprana; no es que seamos superficiales, pero también tiene el físico para hacerlo; y la opinión pública lo reconoce bastante bien con una carrera de poco más de 20 años.
Así que por acá les contaremos de sus mejores personajes y películas, por las cuales nos emociona que se convierta en el próximo James Bond. Dejaremos fuera su participación en el MCU como Quicksilver y sus primerísimos roles.
Kick Ass
Kick Ass de 2010 fue la película que lo puso fuerte en el radar de Hollywood. Aquí interpreta al personaje principal llamado Dave Lizewski, un adolescente nerd y amante de los cómics que tras ver un altercado en la ciudad de Nueva York, decide convertirse en una especie de vigilante nocturno (sin tener entrenamiento de nada).
Una vez, al tratar de ayudar a alguien, recibe una paliza que le afecta una parte del sistema nervioso que aumenta su umbral del dolor. Esto sólo lo motiva para volver a salir a las calles a cuidar a los desprotegidos hasta que una noche, alguien lo graba en acción para convertirse en un superhéroe enmascarado y una celebridad.
Sin embargo, no es el único que lo hace, y en realidad, hay más héroes entrenados que protegen las calles, entre ellos Big Daddy y su hija Hit-Girl. Los tres deberán unirse para enfrentar una patética amenza: el hijo de Frank D’Amico, un mafioso. La cinta mostró los dotes de comedia de Aaron Taylor-Johnson, así como sus cualidades para sostener secuencias de acción y de pelea.