La columna
POR CARLOS JARAMILLO VELA
· AMLO: autor de la discordia.
· Sanjuana Martínez: otra evidencia de la corrupción del gobierno de López Obrador.
· AMLO-MORENA: No somos iguales… ¡Somos peores!
Entre acusaciones se desenvuelve el actual proceso electoral, como era de esperarse ante la polarización que desde hace cinco años divide al país, irónicamente por iniciativa, obra y estrategia de quien lo (des)gobierna: Andrés Manuel López Obrador. Sin embargo, y a pesar de su reprobación desde la perspectiva ética, el juego rudo y la judicialización de los procesos electorales son un prácticas comunes que en diversos países los partidos políticos suelen emplear para descalificar al adversario. En nuestro país desde hace años ha venido cobrando fuerza este tipo de maquinaciones.
No somos la excepción, claro que el uso de los recursos jurídicos para obtención de dividendos electorales y políticos no es exclusivo de nuestro país. Basta mirar hacia Estados Unidos y enterarnos de las denuncias legales que pesan sobre los virtuales candidatos presidenciales de los partidos republicano y demócrata, el expresidente Donald Trump y el actual mandatario Joe Biden, para llegar a la conclusión de que la naturaleza humana es proclive al uso de cualquier medio para lograr sus fines (como lo instituyera Nicolás Maquiavelo).
No obstante que podría decirse que estas prácticas de judicialización con propósitos electorales ya forman parte de las estrategias ordinarias en las campañas de los partidos políticos, también es innegable que la confrontación en la que hoy se halla envuelto México es el resultado perfecto de un plan que desde hace poco más de cinco años ha venido siendo ejecutado diaria y sistemáticamente, a través de las “conferencias de prensa” mañaneras por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Sanjuana Martínez, reconocida periodista mexicana a nivel internacional, y exdirectora de la extinta agencia de noticias del Estado mexicano, Notimex, ha señalado una muestra más de los casos de corrupción que ponen en evidencia al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador. Con claridad, la comunicadora ha revelado contar con pruebas de que durante el proceso de liquidación del personal de Notimex se le exigió la quinta parte (20%) del importe de las liquidaciones de los trabajadores, como contribución a la campaña de Claudia Sheinbaum, precandidata presidencial morenista. Asimismo, la conocida periodista ha denunciado que se le pretendió ofrecer a ella una fuerte cantidad de dinero a cambio de prestarse a tal maniobra.
En el centro de las acusaciones figura el Secretario de Trabajo y Previsión Social, Marath Baruch Bolaños López, a quien Sanjuana Martínez señala como el ejecutor de tal propuesta indecorosa. Este escándalo es otro más de la serie de malos manejos que se le atribuyen a la administración de López Obrador. Si el presidente
realmente quisiera ser honesto, como dice serlo al externar sus frases que coloquialmente suele expresar durante sus conferencias mañaneras para denostar a los gobiernos anteriores, así como a sus opositores y adversarios, tendría que complementar su clásico dicho que reza “no somos iguales…” añadiéndole la aclaración “…¡Somos peores!.”