La columna
POR CARLOS JARAMILLO VELA
· 11 de septiembre de 2024: día crucial para la Independencia Nacional.
Septiembre es el “Mes de la Patria”, ya que en septiembre de 1810 el padre Miguel Hidalgo inició el movimiento de Independencia Nacional, que nos liberó del yugo impuesto por la Corona española durante 300 años de dominación; esa gesta nos permitió alcanzar nuestra Independencia Política Externa. Paradójicamente, en este mes y en la víspera del tradicional festejo de nuestra Independencia, México enfrenta una nueva lucha por su libertad e independencia, pero en esta ocasión la batalla no se libra con fusiles ni a campo abierto, sino con argumentos y en la tribuna del Senado de la República; y, a diferencia de 1810, la independencia que ahora está en juego es la Independencia Política Interna, pues el presidente Andrés Manuel López Obrador, y su partido MORENA, pretenden obtener el poder absoluto para modificar la Constitución, e imponer en nuestro país un regimen totalitario, en el que imperen solo ese partido y su doctrina ideológica, en detrimento de las libertades democráticas y los derechos fundamentales que hoy la norma suprema nos otorga a los mexicanos.
Bajo esta tesitura, el 11 de septiembre de 2024 es una fecha crucial para México, pues ante el pleno del Senado de la República se someterá a votación la propuesta de Reforma al Poder Judicial, planteada por López Obrador. Es fundamental que los 43 senadores de oposición (PAN, PRI y MC) voten contra tal propuesta, como lo han prometido, pues si solo una o uno de ellos votara a favor, o dejara de votar, MORENA y sus aliados obtendrían la mayoría calificada de votos, suficiente para su aprobación. En caso de aprobarse la propuesta referida, nuestro país entraría en un rápido proceso de degradación e involución política e institucional, pues se trastocaría la Constitución y comenzarían a ser extinguidos sistemáticamente los derechos y libertades fundamentales que garantizan el correcto desarrollo de nuestra vida democrática, política, económica, jurídica y social. Esa extinción sistemática obedece al proyecto político totalitarista que López Obrador se encuentra empeñado en implantar, para modificar sustancialmente -y en forma retrógrada- el régimen jurídico-político de México. ¡Es grave la situación!.
El país se encuentra dividido por la controversia que han suscitado la citada propuesta de Reforma al Poder Judicial, y las nocivas consecuencias que esta ocasionaría en perjuicio de las libertades y derechos que hoy gozamos. La sociedad mexicana no sólo se halla polarizada, sino también ante un escenario de gran intranquilidad e incertidumbre del que somos presa decenas de millones de ciudadanos inconformes con las perniciosas pretensiones del presidente y sus legisladores. Tal angustia también ha comenzado a preocupar a nuestros socios comerciales, EE. UU. y Canadá, así como a numerosas empresas extranjeras con inversiones en nuestro país, ya que la instauración de la pretendida reforma lopezobradorista sinificaría la vitual cancelación del Tratado de Comercio que sostenemos con esas naciones, así como la eliminación de cuantiosas inversiones; este Tratado y las empresas trasnacionales han representado significativos
beneficios económicos para México. Si el 11 de septiembre las y los senadores de oposición cumplen su promesa de oponerse a la imposición, la noche del 15 de septiembre de 2024 -cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador dé el tradicional “grito” de celebración de nuestra Independencia Política Externa- será recordada como una de las más afortunadas de nuestra historia nacional, porque podremos festejar que días antes, 43 valientes senadoras y senadores salvaron a México de la tiranía, al defender con patriotismo nuestra Independencia Política Interna, y los derechos humanos y libertades individuales de todos los mexicanos. ¡Que así sea!.